Desde la idea hasta el diseño, nuestras Marie trabajan cada temporada para ofrecernos piezas originales. Inspirándose en las tendencias, definen las formas, las líneas y los colores que compondrán las colecciones de la temporada. Vestidos, tops, pantalones, chaquetas... No se amilanan ante nada y juntas crean un vestuario I.Code brillante, femenino y descarado. Una vez validado su boceto por la directora de la colección, las estilistas hablan con las compradoras a fin de determinar el material más adecuado para el modelo y con las patronistas para los aspectos técnicos. Una vez finalizado el patrón, las estilistas elaboran las fichas técnicas que se enviarán a la oficina de diseño/métodos.

Una vez realizado el dibujo técnico por parte de la estilista, les toca el turno a las patronistas. Son las responsables de la buena realización del producto que luego se produce en serie. Comienzan siempre con un patrón que permite pasar del dibujo al volumen de una prenda. Un ajuste en 3D, por así decirlo. Tras el primer prototipo, realizan los retoques necesarios hasta obtener el modelo perfecto. Luego, el tallaje permite ajustar el primer patrón a todas las tallas existentes (en I.CODE de la 34 a la 44).

La cosedora interviene una vez finalizado el patronaje. Con sus dedos mágicos, monta el primer prototipo y comprueba su viabilidad. Con todas las piezas cortadas, se empieza a montar la prenda según un orden concreto. De esta manera se pueden detectar dificultades y anomalías del patrón o de los materiales y proponer soluciones técnicas rápidas para mejorar el modelo.

Nuestras wonder women del "método" planifican la fabricación de un modelo a partir de la información técnica proporcionada por la oficina de diseño, teniendo en cuenta los parámetros de producción y las especificaciones. Es un trabajo que requiere interactuar directamente con múltiples departamentos, como producción, oficina de diseño, suministro, ventas, así como un contacto regular con proveedores y subcontratistas. Disponer de un servicio de "colocación" nos permite reducir nuestros excedentes textiles: hasta la fecha, ¡nuestra tasa de eficiencia textil es del 85%! Pero, además, deben estudiar los costes de producción, definir los precios de coste y analizar el valor añadido de los productos, así como elaborar fichas técnicas y hojas de instrucciones.
Como parte de nuestra política de RSC, el Dpto. de Métodos establece pruebas en nuevos productos o procesos, como nuevos materiales sostenibles, por ejemplo, y ofrece soluciones para optimizar el rendimiento.